La pelea de la boxeadora intersexual Imane Khelif (con cromosomas XY) en contra de Angela Carini, en octavos de final del peso welter de los Juegos Olímpicos de París, duró solo 46 segundos, luego de que la italiana abandonó el combate tras un potente puñetazo en la nariz y percatarse de la fuerza superior de su contrincante.
De inmediato, la ignorancia sobre la intersexualidad, los discursos de odio, la transfobia e intersexfobia explotaron en redes sociales y medios de comunicación de todo el mundo, ya que miles piensan que «las mujeres que nacieron hombres» no deben participar en las competencias femeninas. Es decir, no tienen idea de las diferencias entre una mujer transexual y una mujer intersexual.
Nacida en Argelia en 1999, Imane Khelif comenzó a destacar en 2022 al ganar medallas de oro en los Juegos del Mediterráneo y el Campeonato de África, y llegar a ser subcampeona mundial amateur. En el Mundial 2023, en India, ganó sus primeros cuatro combates en peso welter, pero fue descalificada antes de la final debido a un test hormonal que mostró niveles de testosterona más altos de lo normal para una mujer.
La Asociación Internacional de Boxeo (IBA) alegó que Khelif no cumplía con el criterio de elegibilidad basado en pruebas de ADN que confirmaron que vive con cromosomas XY, lo que justificó su exclusión. Esta misma medida se aplicó a la exbicampeona mundial Lin Yu-ting, de Taiwán; y bajo el mismo criterio han sido discriminadas las atletas intersexuales Christine Mboma y Beatrice Masilingi, de Namibia, y Caster Senmeya, de Sudáfrica.
A pesar de esta controversia, el Comité Olímpico Internacional (COI) permitió a Khelif y Lin participar en el proceso clasificatorio para los Juegos Olímpicos de París 2024, ya que el COI es responsable de la supervisión del boxeo en los Juegos Olímpicos.
En su infancia, Imane Khelif destacó en el fútbol, pero era atacada por otros niños intimidados por sus habilidades. Para defenderse comenzó a interesarse en el boxeo, pero su padre no aprobaba esta actividad para las niñas, así que Khelif trabajó como recolectora de chatarra y vendiendo comida para financiar su entrenamiento,