Al inaugurarse los Juegos Olímpicos de París 2024, se dio a conocer que participarán al menos 144 atletas abiertamente LGBTIQ+, la segunda cifra más alta en la historia de las Olimpiadas, sólo por debajo de Tokio 2021, cuando participaron 186 atletas LGBTIQ+.
Las cifra podría aumentar conforme se vayan desarrollando las competencias olímpicas, pero ya reflejan una creciente aceptación de la diversidad sexual y de género en el mundo deportivo. Además, hay deportistas que se identifican como LGBTIQ+ pero piden no ser mencionados por posibles conflictos familiares o legales en sus países, si se hiciera pública su orientación sexual o identidad de género.
Sin embargo, los atletas olímpicos abiertamente LGBTIQ+ rondan apenas el 2 por ciento del total de los 10 mil 700 participantes en estas Olimpiadas; mientas que la delegación deportiva de Estados Unidos tiene más del 5% de sus atletas que son LGBTQ declarados.
De acuerdo con un recuento del portal Outsports, las mujeres que se declararon abiertamente homosexuales superan en número a los hombres por un margen de 8 a 1, aproximadamente la misma proporción que en los Juegos Olímpicos de Tokio 2021.
En este 2024, esta lista de atletas LGBTIQ+ está compuesta por países donde ser LGBTIQ+ es legal y culturalmente aceptado: de América del Norte y Latinoamérica, de Europa occidental y del norte, Australia y Nueva Zelanda. Hay deportistas LGBTIQ+ de 23 de las 206 naciones participantes.
Apenas se sabe de tres deportistas de Asia que han declarado abiertamente su homosexualidad: dos boxeadores de Filipinas y uno de Tailandia. Hay cuatro deportistas de África (tres sudafricanos) y una del Equipo de Refugiados, la boxeadora Cindy Ngamba, nacida en Camerún y que ahora vive en Gran Bretaña. Solo hay una deportista de un país predominantemente musulmán: una jugadora de voleibol turca.
Nico Young , corredor de diez mil metros, es el primer atleta masculino de pista y campo estadounidense que se declara abiertamente homosexual, mientras que Timo Cavelius es el primer atleta masculino de judo que se declara gay. La equitación representa casi la mitad de todos los hombres que se declararon abiertamente homosexuales en París.
Algunos de los atletas LGBTIQ+ más destacados en estas Olimpiadas son: El saltador británico Tom Daley ; la estrella del atletismo estadounidense Sha’Carri Richardson (que podría ser la mujer más rápida del mundo); las jugadoras de baloncesto profesionales Diana Taurasi , Brittney Griner , Alyssa Thomas , Breanna Stewart , Jewell Loyd y Chelsea Gray, del equipo de EEUU.; el gimnasta brasileño Arthur Nory ; y los atletas trans no binarios Quinn (fútbol de Canadá) y Nikki Hiltz (atletismo de EEUU).
Participante por primera vez en unos Juegos Olímpicos es la jugadora de rugby estadounidense Stephanie Rovetti, ex estrella del equipo de baloncesto de la Universidad Brigham Young, que forjó una segunda carrera atlética en el rugby. Se crió en Reno como mormona, pero descubrió que su orientación sexual no concordaba con su religión, por lo que participar en París le es muy significativo, según le dijo a Outsports.
Robert Downer, un importante atleta ecuestre del equipo de EEUU durante seis Juegos Olímpicos consecutivos, entre 1984 y 2004, fue uno de los primeros deportistas olímpicos que se declaró gay y reconoce el impacto de la visibilidad: “Mi esperanza es que llegue un momento en que la aceptación universal de las personas LGBTQ haga que la necesidad de anunciarnos como tales sea obsoleta».
Carmen Medina Reyes
30 de julio de 2024 at 19:46
Es muy triste y me parece muy grave que terminando el primer cuarto del siglo 21, aún siga habiendo tanta homofobia, en vez de solo mirar como son esas personas y no obligarlas a vivir escondiendo su auténtico yo. Se les obliga a vivir una doble vida y ser infelices.
Mi apoyo a los que se han atrevido.
Me avergüenza esa gente con tantos prejuicios.